lunes, 9 de diciembre de 2013

Amor y otras drogas.

A veces pienso que estamos echos el uno para el otro, que esas miradas de complicidad, esas sonrisas todo eso significa algo, que antes de conocernos ya sabíamos que algo así nos iba a suceder, que estábamos conectados mucho antes de tener algo que ver el uno con el otro. Lo cierto es que apareciste por casualidad y hoy en día eres de las cosas mas importantes en mi vida, que vivir sin ti, sin tu sonrisa, tu mirada, tus manos en mi cintura y en mi espalda... que vivir sin todo eso seria posible, pero no quiero. Porque cuando me miras y sonríes me siento la persona mas afortunada del mundo por tenerte a mi lado, que a mi cuerpo no le gustan otras manos que no sean las tuyas y que cuando me haces cosquillas, o me miras fijamente para ponerme nerviosa me siento feliz. Tu me haces feliz, pero mas feliz me hace saber que esa sonrisa es por mi, que cuando me gire vas a estar ahí mirándome, pensando en mi, en no dejarme marchar. Cuando el miedo mas grande es que te vayas, porque eso si que da miedo, cuando me levanto y me acuesto pensando en ti, cuando me acuerdo de como nos conocimos, cuando me haces sonreír, cuando te veo y al instante ya tengo una sonrisa en mi cara... Me haces pensar que eres especial, eres el mejor.


Y yo sé que la sonrisa que se dibuja en mi cara, tiene que ver con la brisa que abanica tu mirada. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario